lunes, 3 de diciembre de 2007

EL PORNO

He preguntado a mis compañeros de oficina qué opinan del porno. Carolina se ha reido y me ha mirado extrañada, como si le hiciese una pregunta sobre porno o algo peor. No me ha contestado y espero que no se haya enfadado, no quiero eso. Edu guasón, -¿quieres que te pase unas pelis "peazo" maricón?. Fran me ha hablado del valor curativo del porno, del "relax", de las pajas, de su novia, de los problemas para encontrar un piso decente con ella, de que cobra poco y trabaja mucho. He entendido perfectamente lo de las pajas. Marta ha sido la última a la que le he preguntado y me ha dicho que es una "guarrería para adolescentes". Esa comercialización del sexo la asusta y la confunde porque: "tiene otros valores". Nunca ha visto una peli porno, dice.

5 comentarios:

yusef dijo...

chus, a mí me da que Marta miente: una cosa es que nunca se haya sentado a ver una peli porno, pero ¿de verdad es creíble que nunca le haya pasado alguna por delante? Y en ese caso: parece imposible apartar los ojos de la pantalla. Pregúntaselo, anda, y nos cuentas.

chus dijo...

Ha visto pornografía los segundos justos para quitar la cara asqueada. No sé si eso puede catalogarse como ver porno, desde luego, eso no es difrutar del porno.

Rfa. dijo...

A mí el porno me da miedo y me produce una pizca de tristeza. Pero como hombre (y he aquí la posibilidad de debatir sobre la diferencia de sexos), mentiría si no confesase también que... Bueno, ya sabéis.

yusef dijo...

Entiendo perfectamente lo que dice Rfa. A mí me parece que incluso no ya el porno, sino directamente el sexo (saliéndome del tema y del tiesto) da bastante miedo y a veces un poco de tristeza... Y no sólo por el famoso "Post coitum omne animal triste"...
Bueno, no seamos pesimistas: a veces también da alguna alegría...

June Fernández dijo...

Me parece que es como decir "no me gustan las comedias" habiendo visto sólo las de Steve Martin. Yo también pensaba que no me gustaba el porno, pero el posporno me tiene fascinada, tanto por el contenido sexual como por las implicaciones sociales y políticas que conlleva mostrar otras representaciones de la sexualidad fuera del heterosexismo hegemónico. Y ya me callo, que me repito cada vez más.

Besos pornográficos